La fiebre aftosa es una de las principales amenazas para la seguridad alimentaria y la economía en Sudamérica. Sin embargo, en un logro histórico, la región está cada vez más cerca de erradicar esta enfermedad, con más del 65% de su ganado en áreas libres de fiebre aftosa sin necesidad de vacunación. Este avance es producto de un esfuerzo conjunto entre los sectores públicos y privados de los 13 países miembros de la Comisión Sudamericana para la Lucha contra la Fiebre Aftosa (COSALFA), bajo la coordinación del Centro Panamericano de Fiebre Aftosa y Salud Pública Veterinaria (PANAFTOSA) de la Organización Panamericana de la Salud (OPS). Este esfuerzo ha sido clave para la mejora de la competitividad del sector ganadero en los mercados internacionales.
En la 51ª reunión de la COSALFA, celebrada en abril de 2025 en Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, se destacó el importante paso que darán Bolivia y Brasil al recibir en mayo el reconocimiento de la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) como países libres de fiebre aftosa sin necesidad de vacunación. Este reconocimiento será un hito en la lucha contra la fiebre aftosa, una enfermedad que durante décadas ha afectado tanto a las comunidades rurales como a las economías de los países sudamericanos.
El proceso hacia la erradicación de la fiebre aftosa ha sido largo y arduo. A lo largo de los años, la vacunación del ganado ha sido la principal estrategia utilizada para controlar y erradicar la enfermedad. Sin embargo, el avance de Sudamérica ha permitido que varios países logren erradicarla sin depender de la vacunación sistemática. De hecho, la región ha pasado del 35% al 65% de su ganado en áreas libres de fiebre aftosa sin necesidad de vacunación, lo que representa un paso significativo hacia la meta de erradicar la enfermedad de manera definitiva.
Este progreso no solo se refleja en los logros alcanzados en términos de salud animal, sino también en los beneficios económicos para los países involucrados. Al eliminar la necesidad de vacunar constantemente al ganado, los costos de producción se reducen considerablemente, lo que favorece la competitividad de los productos ganaderos en el mercado global. La erradicación de la fiebre aftosa sin vacunación también tiene el potencial de aumentar las exportaciones de carne y productos derivados, consolidando a Sudamérica como una región clave en la producción y exportación de alimentos de origen animal.
Bolivia y Brasil son ejemplos claros de los avances alcanzados en este ámbito. Ambos países han implementado políticas y estrategias efectivas para erradicar la fiebre aftosa sin vacunación, lo que les permitirá seguir creciendo en el sector ganadero sin los costos asociados a la vacunación constante. Estos esfuerzos conjuntos entre los sectores público y privado han sido fundamentales para alcanzar este éxito, y su modelo podría servir de referencia para otros países que aún enfrentan desafíos en el control de la fiebre aftosa.
Además de los avances en la erradicación de la fiebre aftosa, la COSALFA también está trabajando en la creación de un banco regional de vacunas. Este banco, conocido como BANVACO, tiene como objetivo garantizar la disponibilidad de vacunas contra la fiebre aftosa en caso de futuros brotes en los países que ya se encuentran libres de la enfermedad. La firma de un protocolo por parte de Bolivia para unirse a este banco es otro paso importante en la consolidación de los logros alcanzados en la lucha contra la fiebre aftosa en la región.
El proceso de erradicación de la fiebre aftosa no ha sido sencillo, pero el esfuerzo continuo de los países sudamericanos ha dado frutos. La colaboración entre los gobiernos, los sectores privados y las organizaciones internacionales ha sido crucial para avanzar hacia un futuro libre de fiebre aftosa en la región. Aunque la enfermedad aún persiste en algunos países, el ejemplo de Bolivia y Brasil muestra que la erradicación es posible, y otros países están tomando nota de estos avances para seguir el mismo camino.
En conclusión, la erradicación de la fiebre aftosa en Sudamérica está más cerca que nunca. Con más del 65% del ganado en áreas libres sin necesidad de vacunación, la región está logrando avances significativos en la lucha contra esta enfermedad. El trabajo conjunto de los países de la COSALFA, junto con el apoyo de la OPS y otras organizaciones internacionales, está permitiendo que Sudamérica se acerque cada vez más a su objetivo de erradicar la fiebre aftosa, garantizando no solo la salud animal, sino también un futuro económico más próspero para sus países.
Autor: Grogunn Dithas